River se jugaba una parada difícil en Sarandí. Arsenal siempre es un rival que lo complicó al Millonario, y hoy en el Viaducto, de la mano de Gustavo Alfaro, querían mantener ese invicto sorpresivo que acumulan en las primeras fechas del Apertura.
Arrancó el partido y ninguno de los dos prevalecía en el juego. La mitad de cancha poblada de los locales no le permitía a los hombres de Passarella tomar la pelota con comodidad. El Kaiser sorprendió en la previa y no puso a Augusto Fernández entre los titulares, como todos esperaban, y mandó a Ferrari al mediocampo. Tuzzio de cuatro y volvió Nasuti a la zaga central. La primera de riesgo fue para River: Gonzalo Higuaín agarró la batuta y se metió en el área después de un pase de Ortega, pero Cuenca salvó su arco. Dominaba el equipo visitante y Arsenal aguantaba muy atrás.
El planteo de Alfaro era claro, y los centros buscando las cabezas de Casteglione y compañía eran una constante. El Millonario respondía con la habilidad de Ortega y la garra del Pipita, que estaba prendido. Y así llegó la apertura del marcador para River, con una buena combinación entre el Burrito, Ferrari y Belluschi. Se animó Ariel y desparramó varios rivales, se la pasó al ex de Central que desde el piso encontró sólo al ex Newell's, quien no falló y definió cruzado al palo más lejano de Cuenca. Una ventaja merecida.
Los dirigidos por Passarella dominaban el encuentro y abrían la cancha. Zapata por izquierda y Ferrari por derecha tomaban cada vez más protagonismo. También Mareque aprovechaba los espacios que daba el mediocampo de Arsenal. El Burrito llevaba las riendas del Millonario y dejó sólo una vez más a Higuaín, pero esta vez la mandó por arriba del travesaño. Juan Pablo Carrizo no tenía mucho trabajo y en cada ocasión que fue exigido por los centros mostró seguridad.
Obolo era de los mejores en el conjunto local, pero poco podía hacer. Cuando Arsenal consiguió tener el control de la pelota, River respondió con un contraataque a la perfección. Ferrari robó y se fue al ataque, se la pasó a Ortega que habilitó al Pipita: entró al área y estrelló el travesaño de un derechazo. Buena primera mitad de los del Kaiser.
Alfaro metió cambios para el complemento y se la jugó por Javier Yacuzzi y Andrés Pérez. River tenía todo controlado, pero una irresponsabilidad de René Lima puso en riesgo la victoria parcial. El volante central recibió la segunda amarilla por una entrada fuerte y dejó al Millonario con diez hombres a los seis minutos. A la jugada siguiente, Elizondo cobró penal para el visitante y Passarella volvió a respirar. Víctor López agarró innecesariamente a Higuaín en el área tras un corner y el árbitro mundialista no dudó. Ortega lo transformó en gol y fue el segundo desde que volvió al club.
Raymonda apareció en el conjunto del Viaducto y con un tiro libre que pegó en el palo estuvo cerca de conseguir el descuento. Valdemarín fue la última ficha que puso Alfaro en cancha y generó más velocidad en el ataque. De a poco salieron del fondo y se arrimaban con más peligro al área de Carrizo. El Millonario buscaba tener la pelota la mayor cantidad de tiempo posible y esperar que corran los minutos. Belluschi se atrasó un poco para ocupar el lugar de Lima, hasta que el técnico se decidió e hizo debutar al uruguayo Marcelo Sosa a los veintiséis del complemento. Dejó su lugar Ortega y el Pipita quedó sólo arriba.
Pasaba el tiempo y los de Alfaro no lograban el gol y tampoco preocupaban demasiado. Nasuti y Gerlo estaban sólidos en la defensa y Tuzzio cerró su lateral. El Piojo Valdemarín peleaba todas, aunque por momentos era pura impotencia por la férrea marca de los visitantes. La victoria de River ya estaba asegurada y el Kaiser puso a Oyola y Juan Antonio, por Mareque e Higuaín.
El equipo de Passarella consiguió un buen triunfo y vuelve a meterse en la lucha. Sin brillar, pero con un juego efectivo logró tres puntos clave para no perderle pisada a Boca. De a poco el entrenador va encontrando el equipo, y con Higuaín y Ortega toma otro color. Por su parte, Arsenal perdió el invicto y mostró falta de audacia para buscar el partido.
Arrancó el partido y ninguno de los dos prevalecía en el juego. La mitad de cancha poblada de los locales no le permitía a los hombres de Passarella tomar la pelota con comodidad. El Kaiser sorprendió en la previa y no puso a Augusto Fernández entre los titulares, como todos esperaban, y mandó a Ferrari al mediocampo. Tuzzio de cuatro y volvió Nasuti a la zaga central. La primera de riesgo fue para River: Gonzalo Higuaín agarró la batuta y se metió en el área después de un pase de Ortega, pero Cuenca salvó su arco. Dominaba el equipo visitante y Arsenal aguantaba muy atrás.
El planteo de Alfaro era claro, y los centros buscando las cabezas de Casteglione y compañía eran una constante. El Millonario respondía con la habilidad de Ortega y la garra del Pipita, que estaba prendido. Y así llegó la apertura del marcador para River, con una buena combinación entre el Burrito, Ferrari y Belluschi. Se animó Ariel y desparramó varios rivales, se la pasó al ex de Central que desde el piso encontró sólo al ex Newell's, quien no falló y definió cruzado al palo más lejano de Cuenca. Una ventaja merecida.
Los dirigidos por Passarella dominaban el encuentro y abrían la cancha. Zapata por izquierda y Ferrari por derecha tomaban cada vez más protagonismo. También Mareque aprovechaba los espacios que daba el mediocampo de Arsenal. El Burrito llevaba las riendas del Millonario y dejó sólo una vez más a Higuaín, pero esta vez la mandó por arriba del travesaño. Juan Pablo Carrizo no tenía mucho trabajo y en cada ocasión que fue exigido por los centros mostró seguridad.
Obolo era de los mejores en el conjunto local, pero poco podía hacer. Cuando Arsenal consiguió tener el control de la pelota, River respondió con un contraataque a la perfección. Ferrari robó y se fue al ataque, se la pasó a Ortega que habilitó al Pipita: entró al área y estrelló el travesaño de un derechazo. Buena primera mitad de los del Kaiser.
Alfaro metió cambios para el complemento y se la jugó por Javier Yacuzzi y Andrés Pérez. River tenía todo controlado, pero una irresponsabilidad de René Lima puso en riesgo la victoria parcial. El volante central recibió la segunda amarilla por una entrada fuerte y dejó al Millonario con diez hombres a los seis minutos. A la jugada siguiente, Elizondo cobró penal para el visitante y Passarella volvió a respirar. Víctor López agarró innecesariamente a Higuaín en el área tras un corner y el árbitro mundialista no dudó. Ortega lo transformó en gol y fue el segundo desde que volvió al club.
Raymonda apareció en el conjunto del Viaducto y con un tiro libre que pegó en el palo estuvo cerca de conseguir el descuento. Valdemarín fue la última ficha que puso Alfaro en cancha y generó más velocidad en el ataque. De a poco salieron del fondo y se arrimaban con más peligro al área de Carrizo. El Millonario buscaba tener la pelota la mayor cantidad de tiempo posible y esperar que corran los minutos. Belluschi se atrasó un poco para ocupar el lugar de Lima, hasta que el técnico se decidió e hizo debutar al uruguayo Marcelo Sosa a los veintiséis del complemento. Dejó su lugar Ortega y el Pipita quedó sólo arriba.
Pasaba el tiempo y los de Alfaro no lograban el gol y tampoco preocupaban demasiado. Nasuti y Gerlo estaban sólidos en la defensa y Tuzzio cerró su lateral. El Piojo Valdemarín peleaba todas, aunque por momentos era pura impotencia por la férrea marca de los visitantes. La victoria de River ya estaba asegurada y el Kaiser puso a Oyola y Juan Antonio, por Mareque e Higuaín.
El equipo de Passarella consiguió un buen triunfo y vuelve a meterse en la lucha. Sin brillar, pero con un juego efectivo logró tres puntos clave para no perderle pisada a Boca. De a poco el entrenador va encontrando el equipo, y con Higuaín y Ortega toma otro color. Por su parte, Arsenal perdió el invicto y mostró falta de audacia para buscar el partido.
FECHA 5 APERTURA 2006
SARANDI
DOMINGO 3 DE SEPTIEMBRE
Arsenal de Sarandí 0
River Plate 2
Fernando Belluschi, Ariel Ortega -p-
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