Newell's comenzó el Torneo Apertura ya sin sus dos figuras del título conseguido en el Apertura 2004: Fernando Belluschi y Ariel Ortega, ambos transferidos a River. Nadie daba un centavo por el equipo de Nery Pumpido, pero el ex arquero campeón del mundo supo armar un buen equipo en poco tiempo. En las dos primeras fechas arrasó de la mano de sus dos delanteros paraguayos Santiago Salcedo y Oscar Cardozo. Derrotó por 3 a 0 a Vélez e igualó 3-3 en el Monumental ante River, en un partido que mereció ganar. Y a partir de allí se pinchó, no volvió a ganar y el rendimiento del equipo se fue a pique.
Llegaba la sexta fecha en el Parque de la Independencia. El rival era Arsenal. Muy difícil. El equipo de Gustavo Alfaro sumaba dos victorias y de conseguir los tres puntos en Rosario se prendía en el lote de arriba con un partido menos, ya que debe el encuentro ante Godoy Cruz por la segunda fecha (se suspendió por incidentes).
Los primeros minutos del partido fueron con el freno de mano puesto. Parsimonioso. El juego se desarrollaba como el equipo visitante lo proponía, poco vértigo, poca velocidad. Newell's tenía un poco más la pelota, pero la marca de Arsenal en el medio frenaba los tibios intentos de la Lepra. Juan Pablo Caffa aguantaba la pelota arriba, y los jugadores locales se empezaban a impacientar. Parecía que Arsenal estaba agazapado, y que esperaba el momento justo para dar el golpe.
Recién a los 28 Newell's tuvo la primera situación y fue por un error ajeno. Gabriel Loeschbor cerró mal y Salcedo quedó sólo para el gol, pero no pudo definir. No había muchas diferencias entre los dos equipos, el partido era muy parejo. Pero Arsenal sacaba ventaja con sutilezas. A los 34, Pablo Garnier quedó mano a mano con el arquero Justo Villar. El paraguayo lo tumbó en el área y el árbitro Rafael Furchi cobró penal. Mauro Obolo le dio fuerte al medio y se fue festejando. El 1 a 0 para Arsenal era justo, pero con poco. Los de Alfaro justificaban la victoria, aunque sus argumentos era escasos. Newell's era pura modorra.
Para el segundo tiempo, Pumpido se cansó y metió mano. Lo mandó a la cancha a Sebastián Arrieta por Hugo Colace. Un delantero por un volante de marca. Un cambio ambicioso, para ir a la cacería. Además, Germán Ré salió lesionado y en su lugar ingresó Germán Rivera. ¿Quién hubiera pensado que el cambio que más le resultó a Newell's fue el obligado?
Cambió la cara de la Lepra. A los 3, Spolli lo tuvo de cabeza y a los 8, Adrián Peralta sacó un buen remate, tras una pared entre Cejas y Arrieta, que Cuenca supo contener. Pero el desahogo llegó a los 11. Un cetro pasado cayó en el área de Arsenal, y Rivera apareció por atrás para meter el frentazo. Le cambió el palo al ex arquero de Racing y se fue gritando el empate. Pumpido largaba el aire, aliviado. Rivera festejaba su primer gol en Primera.
Pero Arsenal no bajó los brazos. Jorge Ortiz lo tuvo tras un rebote que regaló Villar, pero el Marciano no llegó a darle a la bola. Después respondió Arrieta con un cabeazazo al palo. Pero a los 19, tras un tiro libre, Carlos Casteglione se agachó en el borde del área chica, metió el cabezazo y estampó el 2-1 para el visitante. Otra vez Newell's tenía que volver a remar.
El partido ahora tenía velocidad, iban y venían. Los goles le dieron brillo al encuentro y el espectáculo mejoró. Arrieta le dio aire al ataque de Newell's y a pesar de la bronca de Pumpido por la desatención en la marca, en el gol de Casteglione, el local iba con todo a buscar, otra vez, la igualdad. Y el que busca encuentra. Tiraron un centro al área de Arsenal, para la cabeza salvadora de Tacuara Cardozo. El paraguayo se elevó, metió el cabezazo y la clavó. Golazo. Acrobático, armónico en los movimientos, el salto y el posterior cabezazo de Cardozo fueron perfectos. El 2-2 le ponía justicia al partido.
En el tramo final del partido, el local fue por la victoria, con el empuje de su gente y con los gritos de Pumpido desde la línea. Arsenal estaba contra su arco, pero Newell's estaba abierto para la contra. Mucha tensión, mucho nerviosismo, pero ya no hubo chances. Se conformaban con el punto. Furchi pitó el final y el partido se fue con el 2-2. Newell's sigue sin poder ganar, aunque parece despertar. Arsenal sumó un punto muy valioso en una cancha difícil.
Llegaba la sexta fecha en el Parque de la Independencia. El rival era Arsenal. Muy difícil. El equipo de Gustavo Alfaro sumaba dos victorias y de conseguir los tres puntos en Rosario se prendía en el lote de arriba con un partido menos, ya que debe el encuentro ante Godoy Cruz por la segunda fecha (se suspendió por incidentes).
Los primeros minutos del partido fueron con el freno de mano puesto. Parsimonioso. El juego se desarrollaba como el equipo visitante lo proponía, poco vértigo, poca velocidad. Newell's tenía un poco más la pelota, pero la marca de Arsenal en el medio frenaba los tibios intentos de la Lepra. Juan Pablo Caffa aguantaba la pelota arriba, y los jugadores locales se empezaban a impacientar. Parecía que Arsenal estaba agazapado, y que esperaba el momento justo para dar el golpe.
Recién a los 28 Newell's tuvo la primera situación y fue por un error ajeno. Gabriel Loeschbor cerró mal y Salcedo quedó sólo para el gol, pero no pudo definir. No había muchas diferencias entre los dos equipos, el partido era muy parejo. Pero Arsenal sacaba ventaja con sutilezas. A los 34, Pablo Garnier quedó mano a mano con el arquero Justo Villar. El paraguayo lo tumbó en el área y el árbitro Rafael Furchi cobró penal. Mauro Obolo le dio fuerte al medio y se fue festejando. El 1 a 0 para Arsenal era justo, pero con poco. Los de Alfaro justificaban la victoria, aunque sus argumentos era escasos. Newell's era pura modorra.
Para el segundo tiempo, Pumpido se cansó y metió mano. Lo mandó a la cancha a Sebastián Arrieta por Hugo Colace. Un delantero por un volante de marca. Un cambio ambicioso, para ir a la cacería. Además, Germán Ré salió lesionado y en su lugar ingresó Germán Rivera. ¿Quién hubiera pensado que el cambio que más le resultó a Newell's fue el obligado?
Cambió la cara de la Lepra. A los 3, Spolli lo tuvo de cabeza y a los 8, Adrián Peralta sacó un buen remate, tras una pared entre Cejas y Arrieta, que Cuenca supo contener. Pero el desahogo llegó a los 11. Un cetro pasado cayó en el área de Arsenal, y Rivera apareció por atrás para meter el frentazo. Le cambió el palo al ex arquero de Racing y se fue gritando el empate. Pumpido largaba el aire, aliviado. Rivera festejaba su primer gol en Primera.
Pero Arsenal no bajó los brazos. Jorge Ortiz lo tuvo tras un rebote que regaló Villar, pero el Marciano no llegó a darle a la bola. Después respondió Arrieta con un cabeazazo al palo. Pero a los 19, tras un tiro libre, Carlos Casteglione se agachó en el borde del área chica, metió el cabezazo y estampó el 2-1 para el visitante. Otra vez Newell's tenía que volver a remar.
El partido ahora tenía velocidad, iban y venían. Los goles le dieron brillo al encuentro y el espectáculo mejoró. Arrieta le dio aire al ataque de Newell's y a pesar de la bronca de Pumpido por la desatención en la marca, en el gol de Casteglione, el local iba con todo a buscar, otra vez, la igualdad. Y el que busca encuentra. Tiraron un centro al área de Arsenal, para la cabeza salvadora de Tacuara Cardozo. El paraguayo se elevó, metió el cabezazo y la clavó. Golazo. Acrobático, armónico en los movimientos, el salto y el posterior cabezazo de Cardozo fueron perfectos. El 2-2 le ponía justicia al partido.
En el tramo final del partido, el local fue por la victoria, con el empuje de su gente y con los gritos de Pumpido desde la línea. Arsenal estaba contra su arco, pero Newell's estaba abierto para la contra. Mucha tensión, mucho nerviosismo, pero ya no hubo chances. Se conformaban con el punto. Furchi pitó el final y el partido se fue con el 2-2. Newell's sigue sin poder ganar, aunque parece despertar. Arsenal sumó un punto muy valioso en una cancha difícil.
FECHA 6 APERTURA 2006
ROSARIO
DOMINGO 10 DE SEPTIEMBRE
Newell's Old Boys 2
Germán Rivera, Oscar Cardozo
Arsenal de Sarandí 2
Mauro Óbolo -p-, Carlos Casteglione
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