HAZAÑA

30 DE SEPTIEMBRE
2DA FASE
SUDAMERICANA 2004
MONUMENTAL

River Plate 0

Arsenal 0

RESULTADO GLOBAL
ARSENAL 2
RIVER 1

ARSENAL AVANZA A LOS CUARTOS DE FINAL DE LA SUDAMERICANA 04'
EL RIVAL: BOLIVAR DE LA PAZ.

La noticia que dejó anoche estupefacto al mundo futbolístico la entregó Arsenal, el equipo que desde el Viaducto, en Sarandí, llegó hasta Núñez para escribir su nombre en la historia con letras grandes. En el Monumental, le arrancó un empate en cero a River y, gracias a la victoria por 2 a 1 obtenida como local, se clasificó para los cuartos de final de la Copa Sudamericana, primer torneo internacional en el que participa.

Arsenal imaginó el partido de ayer como si fuera una batalla, lo que no deberá llevar a pensar en malas artes o violencia. Jorge Burruchaga, el director técnico que se vistió de general, diagramó en el campo una fortaleza cerca de la valla defendida con sobriedad por Alejandro Limia. 

Dos líneas de cuatro hombres, fieles escuderos delante del arquero, defendieron con estoicismo y vigor el terreno propio e intentaron atacar el sector adversario por sorpresa, con el contragolpe como arma de doble posibilidad: si las corridas de José Luis Calderón y Germán Denis no generaban oportunidades de gol, entonces lo que intentaban era provocar faltas cerca del área, para hacer temblar a la defensa millonaria con eso envíos aéreos que tanto lo complican al equipo de Leonardo Astrada.

River no se quedó de brazos cruzados. El problema fue que su voluntad –enorme, incansable– no le alcanzó. A veces, como anoche, hace falta mostrar variedad de recursos para quebrar un planteo que fue de neto corte defensivo, sí, pero inteligente, y que no necesitó recurrir a las faltas como sistema, a la simulación y a las sucesivas demoras para que los minutos transcurrieran. 

En este caso, Arsenal dejó en claro que es un equipo difícil por virtudes, que carecerá de grandes nombres propios o de estrellas, pero que posee una claridad en la búsqueda del objetivo que le faltó al equipo millonario.

River quedó anudado cada vez que llegó a los tres cuartos de cancha adversaria. De por sí, el esquema, con tres defensores para sumar un volante más de ataque, no le solucionó nada a River. En el primer tiempo, Gastón Fernández y Jairo Patiño tuvieron opacas actuaciones, por lo que en la segunda etapa se fueron reemplazados por Marcelo Gallardo y Maximiliano López. Después del empuje inicial en el segundo tiempo, todo volvió a lo que fue durante la primera etapa. 

Arsenal estuvo cerca en los primeros 45 minutos con un cabezazo de Denis y con un centro que no llegó a conectar Patricio González. River, pese a las dificultades, por peso específico se acercó al arco de Limia, que siempre respondió con seguridad y tranquilidad. Cerca se fueron un remate de Pereyra, un cabezazo de Nasuti y un disparo de Cuevas. 

La segunda parte, como ya se dijo, no entregó demasiadas novedades, más que la desesperación del equipo millonario por conseguir de cualquier forma un tanto, en la medida en que el tiempo se terminaba. 

El final, obviamente, mostró las contracaras de River y de Arsenal. El equipo millonario volvió a postergar el sueño de obtener un título internacional, que se le niega desde 1997, cuando se alzó con la Supercopa. Y, lo que es peor, los jugadores se fueron silbados por primera vez desde que Astrada está al frente, lo que marca el nivel mostrado hasta ahora, a pesar de la punta del torneo Apertura. Arsenal, en cambio, sigue subido a la historia. Y mientras espera su rival en cuartos de final (Universidad de Concepción, de Chile, o Bolívar, de La Paz), disfruta de un tiempo de felicidad que parece no terminarse.