Volvió el fútbol, aunque nunca se fue. El Apertura se reanudó en Victoria. Ya está, ya pasó el tiempo del rugby y de las Eliminatorias (aunque en noviembre se vienen dos partidos más). Ahora es el turno del campeonato local, que hierve. No nos olvidemos. Tigre, con 22 puntos, recibía a Arsenal. El equipo de Cagna con un triunfo alcanzaba a Independiente. ¿Se acuerdan de cómo venía la mano?
El hincha de verdad siempre se acuerda. Por eso en Victoria la gente de Tigre copó el estadio. Y a pesar del caos en el transito en la Capital, los de Sarandí cruzaron de sur a norte para alentar a su equipo. Pasión, como solo el fútbol sabe ofrecer. Pero el juego careció de brillo en el primer tiempo. Cagna respetó la línea de tres en el fondo, pobló el medio y apostó fuerte a Lazzaro, su goleador. Arsenal se dedicó más a romper el juego del local que a jugar. Dos líneas de cuatro, un media punta en Raymonda y Calderón en el área, el dibujo de Alfaro.
Lo mejor estuvo del lado del local. Y desde los pies o la cabeza de Lazzaro. A los 2, Pasini, que fue titular por primera vez en Primera, envió el centro desde la derecha, pasado, tras capturar el rebote de una pelota parada. Lazzaro la bajó al medio con un frentazo y Morero, a pesar de que se arrojó en palomita no pudo cabecear al gol. Fue el primer aviso.
Cortaba con falta Arsenal constantemente. Así se ganaron la amarilla San Martín y Garnier. Porque Rusculleda, que tardó en despertar comenzaba a desbordar. Porque Morel manejaba la pelota con criterio y porque Lazzaro estaba imparable. El nueve sacó un derechazo desde 30 metros que murió en el techo del arco de Cuenca, a los 13. Casi. Y después lo desbordó a Mosquera por derecha y envió el centro para Suárez, que no pudo definir. Bien Galmarini para recuperar y Castaño desde el equilibrio en el medio. Arsenla lucha y falta. Romper y no crear. Lo único, un remate de zurda de Carrera desde afuera del área, a los 26, que se fue cerquita. Terminó el primer tiempo en cero. Pero el gol no tardaría en llegar si Tigre mantenía su actitud.
Sólo diez minutos pasaron en el segundo tiempo para que Tigre se pusiera arriba en el marcador. El gol estaba al caer. Galmarini avanzó por derecha y remató cruzado. Cuenca dio rebote, le quedó a Morel que no pudo definir ante la marca de Gandolfi. El defensor rechazó, pero mal porque Lazzaro lo atoró. Entonces le quedó a Rusculleda, inclinado sobre la izquierda. Salió el remate, directo al palo. Y un nuevo rebote le quedó a Morel. Esta vez sí, el enganche la mandó a guardar.
Llegó la tranquilidad. El desahogo. Alfaro mandó los cambios inmediatamente: afuera Díaz y Garnier, adentro Andrizzi y el Papu Gómez. Se animó un poco más Arsenal. Pero Tigre, agazapado, seguía dominando el partido. Desde lo táctico y desde el concepto. Porque lastimaba con cada contra. Y lastimó tanto que lo liquidó. A los 26. escapó Morel por el medio. Abrió para Rusculleda que ingresó solo al área por izquierda y definió con un zurdazo cruzado. Llegó el 2-0 y se bajó la persiana.
El equipo de Diego Cagna alcanzó los 25 puntos y llegó a la misma línea que Independiente, en la cima del Apertura, y expectante al partido de Lanús. Arsenal piensa en la Copa Sudamericana, el jueves próximo tiene la revancha con las Chivas de México, por eso los seis partidos sin conocer la victoria en el Apertura no pesa tanto.
El hincha de verdad siempre se acuerda. Por eso en Victoria la gente de Tigre copó el estadio. Y a pesar del caos en el transito en la Capital, los de Sarandí cruzaron de sur a norte para alentar a su equipo. Pasión, como solo el fútbol sabe ofrecer. Pero el juego careció de brillo en el primer tiempo. Cagna respetó la línea de tres en el fondo, pobló el medio y apostó fuerte a Lazzaro, su goleador. Arsenal se dedicó más a romper el juego del local que a jugar. Dos líneas de cuatro, un media punta en Raymonda y Calderón en el área, el dibujo de Alfaro.
Lo mejor estuvo del lado del local. Y desde los pies o la cabeza de Lazzaro. A los 2, Pasini, que fue titular por primera vez en Primera, envió el centro desde la derecha, pasado, tras capturar el rebote de una pelota parada. Lazzaro la bajó al medio con un frentazo y Morero, a pesar de que se arrojó en palomita no pudo cabecear al gol. Fue el primer aviso.
Cortaba con falta Arsenal constantemente. Así se ganaron la amarilla San Martín y Garnier. Porque Rusculleda, que tardó en despertar comenzaba a desbordar. Porque Morel manejaba la pelota con criterio y porque Lazzaro estaba imparable. El nueve sacó un derechazo desde 30 metros que murió en el techo del arco de Cuenca, a los 13. Casi. Y después lo desbordó a Mosquera por derecha y envió el centro para Suárez, que no pudo definir. Bien Galmarini para recuperar y Castaño desde el equilibrio en el medio. Arsenla lucha y falta. Romper y no crear. Lo único, un remate de zurda de Carrera desde afuera del área, a los 26, que se fue cerquita. Terminó el primer tiempo en cero. Pero el gol no tardaría en llegar si Tigre mantenía su actitud.
Sólo diez minutos pasaron en el segundo tiempo para que Tigre se pusiera arriba en el marcador. El gol estaba al caer. Galmarini avanzó por derecha y remató cruzado. Cuenca dio rebote, le quedó a Morel que no pudo definir ante la marca de Gandolfi. El defensor rechazó, pero mal porque Lazzaro lo atoró. Entonces le quedó a Rusculleda, inclinado sobre la izquierda. Salió el remate, directo al palo. Y un nuevo rebote le quedó a Morel. Esta vez sí, el enganche la mandó a guardar.
Llegó la tranquilidad. El desahogo. Alfaro mandó los cambios inmediatamente: afuera Díaz y Garnier, adentro Andrizzi y el Papu Gómez. Se animó un poco más Arsenal. Pero Tigre, agazapado, seguía dominando el partido. Desde lo táctico y desde el concepto. Porque lastimaba con cada contra. Y lastimó tanto que lo liquidó. A los 26. escapó Morel por el medio. Abrió para Rusculleda que ingresó solo al área por izquierda y definió con un zurdazo cruzado. Llegó el 2-0 y se bajó la persiana.
El equipo de Diego Cagna alcanzó los 25 puntos y llegó a la misma línea que Independiente, en la cima del Apertura, y expectante al partido de Lanús. Arsenal piensa en la Copa Sudamericana, el jueves próximo tiene la revancha con las Chivas de México, por eso los seis partidos sin conocer la victoria en el Apertura no pesa tanto.
APERTURA 2007
FECHA 14
VIERNES 19 DE OCTUBRE
VICTORIA
TIGRE 2
Martín Morel, Sebastián Rusculleda
ARSENAL 0
Martín Morel, Sebastián Rusculleda
ARSENAL 0
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