jueves, 10 de febrero de 2005

2005 para Arsenal

De ensueño. Así fue el 2004 que vivió Arsenal. Muchas emociones le tocaron pasar al equipo del Viaducto el año pasado.

Volvió a jugar de local en Sarandí, clasificó para una copa internacional por primera vez en su historia... Pero ahora hay que empezar de cero: barajar y dar de nuevo.

Lo más destacado es la continuidad de Jorge Burruchaga. Hace tres años y medio que es el técnico, algo poco común en el fútbol mundial. Si bien el DT anunció que tras este campeonato dejará el club, si alguien tiene méritos por todo lo que logró este equipo hasta ahora, ése es Burruchaga.

Desde que arribó a Primera en 2002, Arsenal nunca descuidó su verdadero objetivo, que es establecerse en la máxima categoría. No es una tarea fácil, pero en estos años acortó, claramente, las distancias con otros conjuntos.

Sin duda, el punto culminante de todas sus conquistas y progresos fue la clasificación para la pasada Copa Sudamericana, donde dejó en el camino a Banfield y River, y cayó ante el Bolívar en cuartos de final.

El principal objetivo de este torneo será quitarse los motes de "mezquino, conservador y amarrete". Para eso llegó un jugador con mucha habilidad y movilidad como Leonel Ríos, quien es mediocampista por derecha o enganche —no es su puesto habitual, pero puede funcionar—, quien se juntará con Javier Morales para generar fútbol.

Ellos dos, sumados a la experiencia goleadora de José Luis Calderón y a la potencia en el área de Germán Denis —quienes tendrán presión desde el banco con Emanuel Rivas y el recién llegado Mario Turdó— son los fundamentos con los cuales Burruchaga cuenta para esta nueva y audaz propuesta.

La virtud número uno de Arsenal es ser un equipo ordenado, sobre todo en el fondo. Alejandro Limia brinda seguridad en el arco, más Cafú Espínola, Casteglione (quien se anotó con varios goles importantes), Víctor López y Jorge Núñez, quienes armaron una defensa sólida en el torneo pasado y sólo sufrieron 16 goles. Leandro Testa y Carlos Ruiz se recuperan de lesiones y pueden rotar entre los del fondo.

En el mediocampo ya no están Roberto Tito Pompei y Patricio Ormazábal, pero con Morales y Ríos se espera que la cuota de buen juego se cubra. Gastón Esmerado y Patricio González completan la media cancha. ¿Las variantes? Rodrigo Mannara, otra incorporación; Santiago Hirsig y el juvenil Rodolfo Quinteros.

Con el sueño de entrar en la Libertadores —deberá realizar una campaña mucho mejor que la anterior—, Arsenal arranca este camino con 19 paradas con la mente puesta en lo de siempre: la consolidación definitiva en Primera

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